Integramos el colectivo:
Noelia Adánez. Estoy en la tarea de comprender el pasado desde mis años como investigadora y profesora en la universidad hace cerca de cinco lustros. En este presente continuo parece importarme más, sin embargo, lo pasado y su trabazón con distintas experiencias intelectuales y artísticas. Mi mirada se ha ido desplazando hacia las literaturas y lo audiovisual, con el ojo siempre puesto en el retrovisor por ver qué es lo que, viniendo por detrás, todavía nos puede dar alcance.
Carolina Espinoza. Es apasionante como las expresiones culturales, la poesía, la poesía visual, la música, la literatura, el cine de ficción, el cine documental y hasta las series, nos ayudan a resignificar el pasado. Son (re) construcciones de lo vivido, (re) interpretaciones de historias que se repiten en un presente mediatizado y contado por unos pocos. Por los que ganaron, o al menos así lo creen. Solo tenemos que estar atentas y conectar con esos discursos ocultos, escudriñar, bucear en ellos y darles voz. Me interesan esos otros/as. Esos olvidados/as. Me interesa parar las antenas, escucharles, conectar y relacionar. Desde hace casi 20 años lo intento hacer desde el periodismo y la cultura audiovisual y, desde hace pocos años, también desde la antropología social.
Enrique García Ballesteros. Me tiran más el álgebra y la física cuántica que el materialismo dialéctico; he descubierto el interés de la hermenéutica jurídica estudiando historia; he aprendido más comunicación trabajando de camarero que de técnico en consultoría; he entendido mejor la antropología de la historia intentando comprar tampones en una farmacia del sudoeste de China que leyendo a Bartolomé Clavero; casi todo lo que sé lo vi en una película o lo leí en un libro. Creo que la humanidad en conjunto (con su historia y su memoria), comparativamente, no es gran cosa, pero que cada ser humano es un universo en peligro de extinción que tiene una capacidad infinita de influir en su entorno y de cambiar las cosas. Lo miro casi todo por un agujerito… mi propia vida también.
Jesús Izquierdo Martín. He compartido inquietudes con mis compañeros de programa desde el mismo momento en que fundamos Contratiempo, con sus virtudes y contrariedades, pero siempre con la grata pretensión de abrir un espacio de diálogo y discusión con los ciudadanos, de expandir un hueco donde fuera posible la construcción colectiva del conocimiento histórico. Soy un tipo de historiador para el que la disciplina académica de la historia no puede estar reñida con el pluralismo interpretativo de mis conciudadanos. Tarea compleja pero también utopía alcanzable.
Esther Pascua Echegaray. Llevo gran parte de mi vida metida en departamentos universitarios y centros de investigación españoles y británicos de Historia Medieval. Más a menudo que menos, me he sentido como un bicho raro por los escasos horizontes e interlocutores intelectuales de un mundo que me resulta bastante estrecho y asfixiante. Contratiempo es aire fresco. Es una ventana a la calle. Es compartir con gente que usa un lenguaje que entiendo. Es una herramienta para plantear discursos críticos, un espacio para debatir y explorar desde multitud de enfoques disciplinares sobre el pasado y el presente y para intentar, en la medida de nuestras posibilidades, colaborar a cambiar «esto».
Saúl Martínez Bermejo. Historiador de formación, nómada doctoral y postdoctoral por diversas tierras de Europa. Me interesa todo relacionado con los libros antiguos y el modo en que su materia altera su significado. He dedicado un buen rato de mi vida a estudiar las ediciones de Tácito en los siglos XVI y XVII y he aprendido bastante sobre la relación entre la política y los modos en que leemos. Creo que era parte de Contratiempo antes de que existiera. Muchas de las personas que están en él son responsables de mi interés por el pensamiento crítico y por desbordar los límites del conocimiento universitario. Ahora mismo estoy estudiando la historia del sonido y el silencio en la colonización Portuguesa y Española de la edad moderna.
Noelia Pena. Escribo. Me muevo en un espacio fronterizo entre la literatura y la filosofía. Me interesan los modos en los que construimos las narraciones que empapan nuestra vida, narraciones que están presentes en el modo en que nos explicamos qué hacemos, qué no hacemos y qué deseamos hacer. Atenta a las grietas por las que se cuela y nos sorprende el pasado. Desde mi periferia intento cambiar mi modo de mirar.
Marisa Ruiz Trejo. Me gusta llevar los micrófonos a la gente para que levante su voz para hablar sobre el pasado y se escuche fuerte por los altavoces. También me gusta hilar las trayectorias académicas de investigadoras que estudian el pasado y tejer vínculos con sus trayectorias personales e íntimas. Contratiempo para mí ha sido una forma alternativa para difundir ciertos contenidos teóricos y situaciones que requieren de un análisis complejo. Me he interesado en los estudios sobre América Latina y las comunidades migrantes,, las teorías críticas feministas y los movimientos sociales.
Pedro Tena. Me interesan las paradojas y las formas de desautomatizar la visión, la expresión y el pensamiento; los vínculos entre la memoria de uno y la de los demás, entre unas lenguas y otras, entre el acto y sus consecuencias, los vasos comunicantes entre ficción y realidad. Pensando en la intemperie de los humillados y dañados, pero también en el coraje de los que perseveran sin transigir, me ha seducido la idea de trabajar en un espacio de diálogo crítico sobre el pasado, que equivale a tratar de reflexionar sobre la distancia entre el aquí y el ahí, sobre lo acontecido como otro disfraz del presente. Vengo de los viajes, la literatura y la traducción, y mis compañeros de Contratiempo me permiten seguir abriendo los ojos y buscar lo común sin renunciar a lo que nos es propio.
Han colaborado o colaboran:
Patricia Arroyo Calderón. Me licencié en Historia en la Universidad Autónoma de Madrid y desde entonces mis inquietudes me han llevado a iniciar estudios de posgrado en varias disciplinas —historia contemporánea, relaciones internacionales, estudios latinoamericanos y traducción— y a residir en varios países, en concreto en Estados Unidos, México y Guatemala. Llevo varios años vinculada desde el punto de vista personal y profesional a un equipo de investigación con sede en la UAM, cuyas preocupaciones centrales tienen que ver con el estudio de las formas discursivas en torno a las cuales se construyeron estados nacionales excluyentes en América Central y, en ese sentido, me interesan las interrelaciones entre la etnia, el género, la pobreza, el racismo y la discriminación, así como los vínculos existentes entre las representaciones históricas, literarias y artísticas de la homogeneidad nacional y las manifestaciones institucionales de la exclusión, particularmente en América Latina. He impartido docencia y conferencias en varias universidades españolas, norteamericanas y centroamericanas, he dedicado una gran parte de mi tiempo a la organización y gestión de programas y eventos académicos y actualmente compagino la redacción de mi tesis doctoral con la traducción de libros de historia, con los proyectos de Contratiempo y con mis responsabilidades como coordinadora académica y administrativa del Máster Europeo en Estudios Latinoamericanos de la UAM. He publicado un libro, El largo siglo XX en Guatemala y Latinoamérica: mujeres, guerrillas y élites intelectuales como agentes del cambio social, una decena de capítulos en libros colectivos y varios artículos en diferentes revistas. En breve saldrá a la luz un nuevo libro del que soy coeditora junto a Landry-Wilfrid Miampika, Antología crítica de ensayos. De la literatura de Guinea Ecuatorial a las literaturas hispanoafricanas.
Sebastiaan Faber. Soy un hispanista holandés errante que ya lleva más años fuera de su país de origen que dentro. Me licencié en Lengua y Literatura Españolas por la Universidad de Amsterdam, ciudad en la que nací ya casi acabada la década de los sesenta. A mediados de los noventa me trasladé a Estados Unidos para hacer un doctorado en la Universidad California de Davis. Desde 1999 enseño en Oberlin College, una pequeña universidad privada en Ohio. Mis publicaciones (dos o tres libros y unos sesenta artículos) versan sobre la historia cultural de España y Latinoamérica de los siglos XX y XXI. El tema del exilio republicano en México -enfoque de mi tesis doctoral- ha producido una serie de bifurcaciones que van desde la teoría de la ideología y el compromiso político de los intelectuales hasta el periodismo literario latinoamericano, la problemática de la memoria histórica en la España postfranquista y la historia institucional del hispanismo en el mundo occidental. Desde hace una década estoy involucrado en los Archivos de la Brigada Abraham Lincoln (Alba), una organización educativa sin ánimo de lucro que se dedica a difundir el legado de los 2.800 voluntarios que salieron de Estados Unidos para ayudar en la defensa de la Segunda República Española. En la actualidad soy presidente de ALBA y encargado de la edición de su revista trimestral, The Volunteer.
François Godicheau. Empecé a formarme en historia en la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales, un lugar que en los noventa abordó los debates sobre la microhistoria y los juegos de escala. Mi paso por Barcelona y Madrid, durante dos años y sin ataduras académicas, me permitió buscar alimento intelectual allí donde quería y muy especialmente en el seminario de historia social del Departamento de Historia Contemporánea de la UAM. Después de doctorarme en historia contemporánea y de intentar innovar en uno de los campos más conservadores a nivel metodológico, el período 1936-1939, he proseguido mi formación gracias al mantenimiento de colaboraciones con colegas y amigos encontrados en la UAM y presentes en la universidad donde actualmente trabajo, Burdeos III. Mis focos de interés intelectual son las políticas de la historia y la construcción de figuras del orden y del desorden durante las épocas moderna y contemporánea.
Germán Labrador (Vigo, 1980): Assistant Professor en Princeton University. Sus investigaciones, en el ámbito de la historia cultural, buscan recuperar experiencias inútiles para las instituciones, interrogándose por la naturaleza fundacional de la violencia en la cultura española, y por el carácter contrahegemónico de prácticas culturales menores y populares. Su primer libro, Letras arrebatadas. Poesía y química en la transición española (Madrid: Devenir, 2009) estudia una generación olvidada de poetas underground, mientras que Culpables por la literatura. Juventud y contracultura en la transición española (manuscrito), analiza la influencia que tuvieron activistas políticos y culturales en los años setenta a la hora de imaginar una democracia que no hemos conocido. En la actualidad, trabaja en una edición crítica del libro de poemas Los Muertos de José Luis Hidalgo, estudiando las voces de los años cuarenta que nos hablan de las fosas franquistas de la guerra. Y se prepara para una investigación más amplia, Iconoclastia y memoria, sobre las luchas simbólicas entre idólatras e iconoclastas en la historia moderna española.
Roberto Morales Estévez. Licenciado en Historia por la UAM, realizo mi DEA en Historia Moderna. Aunque interesado por toda la Historia, me centro en temas de Inquisición en todas sus vertientes. He trabajado durante algo más de diez años como librero a la vez que me he dedicado a todo tipo de colaboraciones. Asesoría editorial, grupos de investigación o conferencias como por ejemplo “Elena de Céspedes: el cóncavo reflejo de la Historia”, impartida en la UAM dentro del ciclo internacional de conferencias «El espejo de la bruja», son algunos ejemplos de ello. Actualmente estoy muy interesado en nuevas tecnologías, educación y difusión cultural a la vez que sigo formándome en mi especialidad. Casi al tiempo de poner en marcha mi blog LicenciaHistorica, desembarco en Contratiempo con mucha ilusión y ganas de aprender del resto de compañeros. Siempre aprendiendo, siempre en movimiento.
Pablo Sánchez León. Nací en Madrid en 1964. Soy licenciado en historia moderna y contemporánea y doctor en historia (1993) por la Universidad Autónoma de Madrid. Llevo veinte años dedicado a la investigación en la confluencia entre ciencias sociales e historia. Me he especializado en conflictos sociales y surgimiento de identidades colectivas entre los siglos XV y XX, que analizo incorporando críticamente planteamientos teóricos y metodológicos de la sociología, la teoría política, la psicología social y la teoría económica. Con el tiempo me he interesado por la reflexión acerca de la moderna ciudadanía en perspectiva histórica, y por la relación entre lenguaje, pensamiento y acción en el pasado histórico. Mi trabajo se centra en España pero siempre en perspectiva comparada con Europa y América Latina. También trabajo desde hace tiempo sobre cuestiones de conocimiento histórico, hermenéutica y narración, así como sobre las relaciones entre la demanda social de conocimiento del pasado y la oferta académica de relatos históricos. He sido Visiting Fellow en el Center for Social Theory and Comparative History de la Universidad de California en Los Ángeles (1994 y 1995) y Visiting Professor en Sabanci University, en Estambul (2003 y 2004). He publicado más de cuarenta artículos y capítulos de libros en publicaciones académicas. Soy autor de Absolutismo y comunidad. Los orígenes sociales de la guerra de los comuneros de Castilla (Madrid, Siglo XXI, 1998) y con Jesús Izquierdo de La guerra que nos han contado. 1936 y nosotros (Madrid, Alianza editorial, 2006). Soy también editor con Jesús Izquierdo del volumen de reflexión titulado El fin de los historiadores. Pensar históricamente en el siglo XXI(Madrid, Siglo XXI, 2008). Actualmente soy investigador contratado en el Departamento de Derecho Constitucional e Historia del Pensamiento y de los Movimientos Sociales y Políticos de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación, en la Universidad delPaís Vasco.
Nuria Valverde Pérez. Licenciada en Filosofía por la UAM y doctora por la misma universidad (2004). En los últimos años me he dedicado a investigar, a documentar y organizar exposiciones, a participar en proyectos sobre gobernanza, sobre globalización, imperios y ciencia, sobre la evolución de la observación científica, sobre narrativa visual en ciencia y a escribir. Y generalmente lo hago intentando averiguar cómo evolucionan las prácticas asociadas a la producción del conocimiento y qué papel tienen en ello los instrumentos y las narrativas científicas. Me preocupa el impacto de las ontologías en la capacitación de los ciudadanos, pero también esclarecer el lugar que nuestra imaginación e imágenes juegan a la hora de consolidar un modelo u ofrecer una alternativa. He publicado, entre otras cosas, Los mundos de la ciencia en la ilustración española (2003) (con Antonio Lafuente) y Actos de precisión. Instrumentos científicos, opinión pública y economía moral en la Ilustración española (2007). Más recientemente -septiembre 2009- he publicado “Small Parts: Crisóstomo Martínez (1638-1694), Bone Histology and the Visual Making of Body Wholeness” (Isis, 100 (3): 505-536) y estoy trabajando sobre historia de la neurología y los electroencefalogramas.